miércoles, 16 de enero de 2013

EL FÚTBOL PERUANO



EL FÚTBOL......ETERNO MARTIRIO


El Fútbol es el Deporte Rey, y eso nadie lo puede negar. Ningún deporte en el mundo tiene tanta audiencia y  es practicado a escala mundial. Cada vez que se realiza un mundial de la Fifa, se bate el récord de audiencia  publicidad y recaudación directa o indirecta que generó el mundial anterior. Basta recordar los más de 3 mil millones de dólares recaudados por la Fifa durante el mundial de Sudáfrica 2010. que además se convirtió en el programa de televisión más visto en ese año a nivel mundial con una audiencia de 26 mil millones de espectadores en todo el mundo a lo largo de los 64 partidos jugados entre el 11 de junio y el 11 de julio de ese año. Un evento de esa naturaleza literalmente paraliza al mundo. Y en nuestro país es igual.
Cada vez que la selección de fútbol o  algún equipo peruano tiene que jugar algún partido internacional válido para la clasificatoria a un evento de envergadura o estando ya en él, llámese Copa América, Copa Libertadores o Copa Sudamericana (cuando existía); ya sea un torneo de mayores o de menores, ya sea un partido clasificatorio o un simple amistoso, siempre habrá gente dispuesto a seguirlo en el estadio o  por televisión, radio o internet. Incluso los partidos locales (Descentralizado, la Liguilla o la Copa Perú) captan la atención del futbolero público peruano, tan fiel al castigo que hasta parece masoquista.A qué me refiero con esto? pues a que el fútbol peruano es tan malo que desde 1982 no va la selección a un mundial de la Fifa, aunque recientes resultados como ese Tercer lugar en la Copa América hayan hecho pensar que tal vez estemos cambiando, pero aunque las matemáticas le digan al entrenador Markarian que aún hay posibilidades de clasificar al mundial de Brasil del 2014, la realidad es que otra vez nos tendremos que contentar con ver el mundial de fútbol desde nuestros televisores.

Copa del Mundo de la FIFA, esquiva desde 1982
Pero, ¿Por qué el fútbol peruano es tan malo? Posibles respuestas hay muchas, Manuel Burga y los burócratas de la Federación,corruptos y argolleros;  los dirigentes de los clubes, incapaces e ineptos; los árbitros, temerosos de amonestar a los faltosos; los entrenadores (Markarián incluido) capaces de las peores decisiones y débiles al momento de disciplinar a los futbolistas;  los jugadores, indisciplinados, voluntariosos, conformistas e interesados solo en su propio bienestar económico; la prensa deportiva, capaz de endiosar a los jugadores o equipos cuando hacen algo bien y de hundirlos hasta lo más profundo cuando no logran los resultados esperados; las barras bravas, capaces de demostrar su algarabía con la mayor violencia cuando un partido se gana y de expresar sus frustraciones con una violencia aún mayor. En fin, tal vez la culpa no sea de uno de ellos sino de todos en conjunto, mientras tanto la hinchada que acompaña con su sufrimiento cada vez que un partido se juega seguirá esperando un buen resultado que tal vez nos lleve a un mundial  y que nos haga recuperar el sitial de potencia futbolística que algún día tuvo el Perú. ¿ Alguna vez lo fuimos?



martes, 8 de enero de 2013

Y LLEGÓ EL 2013!



¡AÑO NUEVO 2013!....Y QUÉ PASÓ CON LA PROFECÍA MAYA?






Ahora que las profecías mayas no se cumplieron, que muchos se asustaron -y hasta se mataron- por gusto y que muchos otros quedaron en ridículo, el mundo continúa en pie. Solo Dios sabe hasta cuando durará; mientras tanto hay que seguir la vida. Y no nos sorprendamos que en cualquier momento alguien salga vaticinando una nueva fecha para el fin del mundo, pues ese es un tema que vende.
Ya en la historia ha habido muchos casos en los que el  fin del mundo fue anunciado y nada pasó, recordemos tan solo lo ocurrido el 31 de diciembre del año 999. Resulta que los supersticiosos europeos de la Edad Media tenían bien metida en su cerebro la idea de que mil años después del nacimiento del Mesías iba a llegar el fin de los tiempos. Que Dios y Jesús bajarían del Cielo para llevar a cabo el Juicio Final, llevarse a los justos al Paraíso y condenar a una vida eterna de sufrimiento en el Infierno a los pecadores, por eso la inminente llegada del año 1000 puso en alerta a todos. La invasión de los mongoles, las pestes, cualquier fenómeno natural en la tierra o en el cielo era tomado como una señal de la inminencia del tiempo de la Gran Tribulación. En la noche del año 999 la mayor parte de los cristianos europeos se congregaron en las iglesias, pues estar en la Casa de Dios podría tal vez hacer la diferencia entre las maravillas del Paraíso y el fuego del Infierno. Días e incluso meses antes, el ambiente era más que manifiesto. Se perdonaron las deudas, las ofensas, los rencores y los delitos. Los presos fueron puestos en libertad al igual que los animales. La gente se desprendía de sus bienes materiales y vivían en la más absoluta pobreza, tal vez recordando aquello de que es más fácil que un camello pase por el agujero de una aguja a que un rico ingrese al Reino de los Cielos. miembros de algunas sectas milenaristas hasta se suicidaron para no ver el fin de los tiempos o para no vivir bajo el reinado de La Bestia, según sea el caso. Al sonar las doce campanadas todo se volvió silencio, esperando alguna manifestación divina que nunca llegó. algunos hasta murieron de infarto y el Papa, que celebraba la misa en Roma se le debe haber hecho un nudo en la garganta. Al darse cuenta que nada iba a pasar, muchos lloraron desconsolados, no de alegría sino de frustración al ver que habían perdido gran parte de su vida y sus bienes esperando un evento divino que nunca llegó. ¡Dios le había dado una segunda oportunidad a la humanidad!. Claro que esto solo ocurrió en la Europa cristiana. El resto del mundo, con religiones diversas, ni se dio por enterado.
La paranoia resurgió el año 1999 pues se creía que el 2000 se vencería el plazo de gracia dado por Dios y esta vez la sicosis fue mundial debido a la masificación de los medios de comunicación...y nada ocurrió. Así que no nos sorprendamos con más predicciones del fin del mundo basadas en nuevas y forzadas interpretaciones de las cuartetas de Nostradamus o en las profecías de San Malaquías. Incluso habrá quienes recurran a Newton o Da Vinci para traernos nuevas fechas de tan fatídico día. ¿El 2013? ¿El 2033? ¿Más allá del año 3000? Nadie lo sabe. Y si alguien conoce alguna nueva profecía Inca, Azteca, Egipcia, India, Mesopotámica o de alguna otra antigua civilización, difúndala!  Tal vez le ligue. Mientras tanto sigamos viendo en la crisis económica mundial, las guerras cada vez más sangrientas, los adelantos científicos y tecnológicos, los fenómenos naturales cada vez más frecuentes y destructivos  y  la arremetida mundial de PSY y su Gamdam Style, más conocido como El Baile del Caballo, las señales del fin de los tiempos.


Si quieren ampliar su visión sobre el tema, les dejo el link de un blog muy interesante.

http://www.vallenajerilla.com/berceo/philipperobert/miedoprimermilenio.htm